Hoy es un día especial a pesar de no tenerte fisicamente te llevo en mi corazón y celebro el día que naciste para darme la vida y darle vida a mis hermanos. Madre querida te mando un beso hasta el infinito. Vives en mi corazón.

Madre hoy es un día agridulce porque me faltas tú, tía Silvia, La Nana y Mamá. No es fácil vivir sin ustedes, sin sus consejos y su amor incondicional. No hay un día de mi vida que no te tenga presente. No sabes cuanto te necesitamos. Me conformo con saber que estás en un mejor lugar donde ya no sufres, no te duele nada, pero es difícil aceptar que no puedo verte ni apapacharte como me gustaba. Madre echanos tu bendición y sigue protegiéndonos desde el cielo. Estás siempre en mi mente y en mi corazón.

Diez años sin tí y es como si el tiempo se detuvo esa horrible noche en que partiste a los brazos de nuestro Señor. Muere quien se olvida y tu sigues viva dentro de mi y dentro del corazón de todos los que te amamos realmente.

Mami no hay un día de mi vida en que no estés presente en mis pensamientos. Todos tus hijos te necesitamos y te seguiremos amando toda la vida. Descansa Madre querida que sufriste mucho en tus últimos días de vida. Bendición madre adorada.