Madre, cuando yo sea famoso en mi currículo voy a poner que empecé flipping the burger at Wendy. Voy a comprarte una mansión en la República Dominicana, pero iré a visitarte porque no pienso vivir en otro país que no sea Los Estados Unidos. Voy a inventar un juego electrónico mejor que el "Nintendo". Todos esos deseos y sueños se esfumaron un 19 de junio de 1994. Todo fue un dulce y bello sueño que no logramos materializar. Hoy después de tantos años no se explicar como he podido seguir viviendo sin tu presencia física. Sé que la fe tan grande que tengo en Dios me ha hecho mitigar este dolor que se hace presente todos los días de mi vida. Madre te mantiene vivo en mi corazón, tu hermano y todos tus buenos amigos te siguen amando también.
La bendición de tu madre que te adora.